Nombre completo: Martin Cointault García.
País de nacimiento: Francia.
Residencia Actual: Murcia.
Estudios: Traducción e Interpretación. En mi país me especialicé en español e inglés, pero cuando estuve de Erasmus en Málaga me centré en francés.
¿Continúas estudiando actualmente? No. Estoy dando clases de francés en Murcia, es algo temporal, pero sé que mi futuro está en España.
¿Hace cuánto tiempo fuiste residente de la RUT? Más o menos, unos tres años. Yo soy de la promoción de Málaga 2015-2016. Me quedé un curso entero, de agosto 2015 a agosto 2016.
«Los servicios siguen siendo excelentes, las habitaciones perfectas, modernas y adaptadas»
En tu búsqueda de alojamiento por la ciudad, ¿cómo encontraste la residencia? Al llegar a Málaga busqué con mi madre un piso en la ciudad, cerca de la Rosaleda, en la Plaza de la Merced, en Carranque… pero todos los pisos eran carísimos y estaban en muy mal estado, con malas condiciones.
Como sabíamos que en todas las ciudades que hay una universidad debe haber residencias universitarias nos fuimos a la zona de Teatinos. Aquí nos topamos con la RUT, hablamos con Isabel (la directora de la Residencia), que nos recibió con una sonrisa, nos dio una visita guiada y nos explicó la vida de la RUT. Me encantó.
¿Cuáles fueron los aspectos que te hicieron decantarte por la Residencia Universitaria Teatinos? Precio, servicios y cercanía a las facultades. Los servicios de comida, limpieza y relaciones personales que me ofrecía la RUT no los encontraba en ningún otro sitio. Este es un lugar donde podemos quedar, vivir, jugar, estudiar, divertirnos, hacer deporte y con unas conexiones con el centro de la ciudad increíbles.
El centro de estudios: «Ofrece un marco de tranquilidad a los alumnos para que estudien, repasen y resuelvan cualquier duda junto a los profesores»
Aunque solo sea para unos días, has vuelto a la RUT, ¿por qué? Aquí mi experiencia fue fantástica, la recordaré toda la vida. El personal me hizo sentir como en casa, eran muy amables, siempre sonrientes y dispuestos ayudar. Si tenías problemas o estabas enfermo te cuidaban.
No siempre todo ha sido fácil. Cuando vienes de otro país, echas de menos a tu familia, tus amigos… Como Erasmus he tenido momentos difíciles, pero al final son las buenas experiencias de la RUT las que han sumado más, fue un sueño estar aquí y me hizo enamorarme de esta ciudad.
¿Notas diferencias entre la RUT en la que tú residiste y la actual? El mayor cambio es el diseño, la estructura de la residencia. El comedor y el hall están totalmente rediseñados y son mucho más cómodos y adaptables.
En el resto no veo grandes diferencias, pero tampoco lo necesitaban. Los servicios siguen siendo excelentes, las habitaciones perfectas, modernas y adaptadas. Esta nueva residencia luce más viva y dinámica.
Ahora que ya no estás residiendo en la RUT, ¿hay algo que eches de menos? Me arrepiento de no haber aprovechado más mi tiempo aquí, en el Centro de Estudios nos enseñan a compaginar nuestro tiempo de estudio con el tiempo libre, pero no supe cómo conciliarlo correctamente. Andalucía es una provincia que me fascina y me hubiese gustado conocerla entera.
«Mi consejo sería que los nuevos residentes se animen a dejar atrás sus miedos y que intenten relacionarse»
Hablando del Centro de Estudios, ¿crees que es una ventaja para los residentes? Por supuesto, creo que es una de las mayores ventajas de la residencia. Ofrece un marco de tranquilidad a los alumnos para que estudien, repasen y resuelvan cualquier duda junto a los profesores.
Ojalá todas las residencias pudiesen ofrecer un servicio como el de la RUT, los universitarios lo agradecerían.
¿Podrías dar algún consejo a los residentes actuales? Sobre todo, a los que estén en mi caso, que sean Erasmus. En las primeras semanas de la RUT comienzan a crearse los grupos y puedes sentirte solo, sentir miedo.
Mi consejo es que los Erasmus se animen a dejar atrás sus miedos y se relacionen, hablar poco a poco con la gente genera nuevas amistades y aumenta tu confianza. A mí me costó, me daba mucha vergüenza, pero con el tiempo hice dos grandes amigos, Enrique y Antonio.
Tres palabras que te vengan a la cabeza al pensar en la RUT: Málaga. Sol. Alegría.
Para acabar, ¿cómo ves tu vida en 5 años? En España, ya sea en Andalucía, Murcia o cualquier lugar, pero siempre en España.